El gobierno chino ha creado un nuevo organismo que se encargará de vigilar los contenidos de la red y autorizar la creación de nuevos medios online.
La Oficina Estatal para la Información en Internet se convierte en un nuevo instrumento para el control de Internet, en un país donde ya existen más de 450 millones de Internautas.
Entre las atribuciones de este nuevo organismo también se encuentra la posibilidad de investigar y castigar las plataformas web que violen la legalidad en China, así como los asuntos sobre registro de dominios y sitios web, distribución de direcciones IP y acceso a Internet.
Con la creación de este organismo, China no solo da un alto valor a la relevancia de Internet como instrumento de comunicación formación e información sino que centraliza su control y censura a través de un único organismo.